El uso de la técnica de tampografía es la elección ideal para obtener impresiones definidas, capaces de resaltar incluso los detalles más pequeños requeridos en los juguetes.
Es posible personalizar desde uno hasta varios colores incluso en sujetos de dimensiones reducidas sin perder la calidad necesaria, resaltando detalles y características incluso muy sutiles. No hay límites en los materiales y formas para imprimir.